Palabra del comandante David en encuentro con rockeros, 17 de marzo

Hermanos y hermanas artistas.

Compañeros y compañeras jóvenes:

A nombre de toda la delegación del EZLN queremos darles la bienvenida y agradecer que hayan venido a convivir un rato con nosotros y manifestarnos su solidaridad con nuestra causa.

De parte nuestra, reciban un saludo fraternal y admiración a todos ustedes.

Hermanos:

Queremos compartir con ustedes nuestra lucha, nuestra causa y nuestros deseos de alcanzar el objetivo.

Como es sabido y conocido ya por todos, el objetivo principal de esta marcha de la dignidad indígena es exigir el cumplimiento de los Acuerdos de San Andrés convertidos en iniciativa de ley en materia de derechos y cultura indígenas, elaborada por la Cocopa a finales de 1996 para que ese derecho de todos los pueblos indios de México quede plasmado en la Constitución mexicana.

El reconocimiento constitucional de los derechos indios sería un paso hacia la convivencia fraterna y respetuosa de las diferentes lenguas y culturas que componen nuestro país y un paso hacia la construcción de una paz con justicia y dignidad que anhelamos y necesitamos los mexicanos y todos los países del mundo. Estas son las razones por las que exigimos el reconocimiento constitucional de los derechos y cultura indígenas.

También hemos venido para exigir la liberación incondicional de todos los compañeros zapatistas presos en Tabasco, Querétaro y Chiapas.

Como también exigimos el retiro total del Ejército federal de 7 posiciones que hasta ahora faltan por realizar: Guadalupe Tepeyac, La Garrucha y Río Euseba.

Estas son las tres señales que exigimos como condiciones mínimas para el reinicio del diálogo entre el gobierno federal y el EZLN. Pero el señor Vicente Fox y varios legisladores del Congreso de la Unión no les interesa la paz, sólo están aferrados de sus ambiciones de poder y de dinero, por eso tratan de impedir a toda costa el cumplimiento de las tres condiciones mínimas. Estos señores del poder pretenden humillarnos y engañarnos con sus mentiras y promesas, pretenden engañar a la nación y al mundo con su falsa voluntad de diálogo y de construir la paz.

A los zapatistas y todos los pueblos conscientes ya no nos engañan. A esos señores no les creemos nada hasta que lo demuestren con hechos reales su voluntad y su disposición de dialogar con nosotros.

Gracias.