Palabra de David en Puebla

27 de febrero de 2001.

Hermanos y hermanas, habitantes de esta capital del Estado de Puebla y de otros pueblos indígenas y no indígenas, cercanos o lejanos de esta ciudad.

Hoy 27 de febrero del año 2001, esta delegación del Comité Clandestino Revolucionario Indígena Comandancia General del Ejército Zapatista de Liberación Nacional, estamos aquí con ustedes, y queremos agradecer por habernos abierto la puerta y sus corazones para recibirnos.

En cuatro días de nuestra marcha de la dignidad indígena y en nuestro paso en los distintos pueblos y ciudades junto con miles de hermanos y hermanas de la sociedad civil nacional e internacional; junto a nosotros se han sumado los pasos y los corazones de millones de hermanos y hermanas mexicanas y de otros países del mundo para acompañarnos en nuestro largo caminar, y junto con ustedes se hará más grande y más fuerte nuestra marcha.

Hermanos y Hermanas, es una gran alegría para nosotros al encontrarnos directamente con ustedes para dirigirles nuestras humildes y sencillas palabras como lo somos los indígenas de Chiapas y de todo México, para decirles que el objetivo principal de nuestra marcha es exigir a los legisladores del Congreso de la Unión, el reconocimiento Constitucional de los derechos y la cultura indígena, es decir, la aprobación de la iniciativa de la Ley de la COCOPA, para que los pueblos ya no tengamos que vivir y morir en la humillación y en el olvido sólo por ser indígenas; para que nuestros pueblos, nuestros niños, jóvenes y ancianos puedan vivir con justicia, con dignidad y respeto mutuo entre las diferentes razas y culturas de nuestra sociedad mexicana para que así podamos construir la paz con justicia y dignidad.