Discurso del Comandante Tacho,

Aguascalientes, Chiapas, 14 de octubre de 1994.

(Transcripción de Fuenteovejuna con base en cintas grabadas durante la sesión de la CND. Entre corchetes las palabras que no se entienden).

Bueno pues, nos permitimos, compañeros de la Convención Nacional Democrática (no nos dirigimos a los compañeros de base de apoyo porque lo que vamos a platicar ustedes, compañeros de base de apoyo, lo saben también).

Hace unos días, nosotros de este lado del supuesto cerco militar, platicábamos con el subcomandante insurgente Marcos y a lo mejor no los ofendimos, o a lo mejor sí, por lo que nosotros pensamos por ustedes. O sea, nosotros, estando de este lado, pensamos por todos los compañeros de la CND. Y una noche, por cierto, junto con algunos compañeros, nosotros lo vemos así: que ante la situación de la CND se necesitaba, o necesita, una ayuda pero así un poco fácil -que le llamamos nosotros- y al mismo tiempo dura, porque a lo mejor no nos van a entender lo que les vamos a proponer. Les decimos eso porque nosotros, principalmente nosotros los del Comité, tuvimos una escuela muy avanzada, el segundo grado en alfabeto, y expresamos muchas palabras muy elevadas en esta escuela. Entonces aprendimos mucho ahí. Entonces por eso infiero que algunas cosas no van a entender por eso. Y por eso escribimos nosotros para no olvidarnos, porque ahí en esas ramas nos enseñaron mucha ciencia, el señor del alfabeto.

Pero como quiera queremos decirles esto que les vamos a platicar: son hechos reales, son nuestros puños, son nuestras ideas, son nuestras realidades. Entonces no lo podemos dudar ni podemos engañarles, porque nosotros no estamos para engañarles, ni a la CND ni a ninguna persona que frecuente acá. Nosotros vamos a hablarles con la verdad.

Entonces pensamos que la CND debe y puede hacer bien un trabajo político, un trabajo político verdadero en cuanto a la forma de organizarse como CND. Ustedes se acuerdan de un cuento que mandó el subcomandante Marcos de que las estrellas, de que los dioses tenían que discutir y todo eso. Nosotros lo vemos por ese lado, y créanos que nosotros lo retomamos así para hacer un trabajo político, o para que alguien diga que es un político, un político de ahora de los que decimos que estamos aquí en la selva, de los que estamos de este lado, pero también creemos que hay políticos del otro lado y supuestamente avanzados. A mí me da pena de que me vengan a decir que es un candidato a senador, pues yo, ¿qué le voy a enseñar aquí? Pero yo sí quiero decirle que sí podemos darles algunos consejos.

Para nosotros, el ejército zapatista, el ser político no es el que hablemos, es lo que hacemos; ésa es la salida política. Y con razón algunos dicen que nosotros sí, que le preguntan al subcomandante Marcos que en dónde está el cuadro político, que por esto y por el otro; entonces el cuadro político está en el comité. Entonces nosotros decimos que el trabajo político es lo que se realiza sobre las bases, y con razón la CND debe hacer trabajo de base, que eso es lo importante. Y ese trabajo ahora lo tiene que hacer ese compañero que ahora se dice que va a ser político, pero lo debe de hacer con las bases. Nosotros lo vemos con esta fuerza que debe empezar la CND. Es muy importante esto, porque ahora sí ese compañero -en este caso los delegados, los compañeros de la CND- deben desarrollar un trabajo político. ¿Y cómo? Primero tienen que ver con quién es con el que van a hablar y tienen que explicarle de la situación nacional. Por eso decimos que ahora debe ser bien político. Y él sólo, ahora sí como los que curan y no como los que dan la medicina, sino como los que curan. Nosotros lo entendemos al revés, que es el que le duele lo que está padeciendo, porque le preguntan:

‑¿Te duele aquí?

‑Sí.

‑¿Te duele aquí?

‑Sí.

Entonces ¿quién dio esa consulta? El enfermo. Entonces nosotros creemos que un trabajo político debe desarrollarse así: que él mismo sea el que dé la receta, porque él mismo va a decir «Bueno, la situación nacional está así y asá y más allá». Es muy conocida por ustedes, mucho mejor conocida por ustedes que tienen todos los medios, ya sea por el periódico, la televisión, las noticias, etc.

Entonces nosotros pensamos que así puede desarrollarse un buen trabajo político en la Convención Nacional Democrática. Entonces esa persona, ese compañero, él va a demostrar que tiene esa necesidad de luchar, hay esa necesidad de luchar. Y como él tiene que decirles -así como les dije de la receta- entonces se le tiene que explicar, se le tiene que encargar que debe hacer otro trabajo político y lo tiene que demostrar, no porque venga aquí en el templete y se pare y diga tal cosa, no, sino que me va a presentar a esta compañera, a este compañero, que lo vea, qué está pensando sobre la situación nacional y qué está pensando ese compañero, la que yo le encargué.

Por eso ese sí es político, ese sí es mero político y es bien fuerte, porque ahí no lo van a engañar como antes nos dijo el subcomandante Marcos, no se tienen que pelear entre uno y otro, porque aquí es el trabajo que vamos haciendo juntos y así se va desarrollando.

Nosotros pensamos que la CND tiene muchas posibilidades, pero así muchas. Nosotros pensamos que si nosotros nos fuéramos por ejemplo a la ciudad de Tuxtla Gutiérrez, digamos, que es la que más conocemos, o a Comitán siquiera que nos dejaran salir, nosotros empezamos a reclutar a compañeros para la CND; empezamos a hacer el trabajo que le llamamos de reclutamiento para la CND; vamos a empezar a reclutar uno y otro y otro y otro, y le vamos a ganar a la presidencia, seguro. Entonces para esto sería el trabajo de la CND, hacer así trabajo real, verdadero, para que, como decía el mayor insurgente Moisés, no desinfle la camisa sino que o la tiene entallada o de plano la tiene guanguita, pero así lo tiene que ser.

Entonces eso es lo que nosotros en un momento dijimos a la CND, con nuestro respeto porque son para todos ustedes; pero sí queremos darles a lo mejor algo que a ustedes les va a servir, algo que ustedes no han podido descubrir. Claro, no son todos nuestros secretos, pero es parte de nuestros secretos, de cómo nosotros nos organizamos. Si le van y le preguntan a la base de apoyo hasta qué fecha fue el último que se reclutó, le va a decir que hace poco, porque nosotros fuimos por paso a paso y fuimos viendo primero que no tome mucho trago, y que de plano no tome, y que no esté hablando con gente extraña, y no tiene que decir qué está pasando, cuándo pasó, qué horas, qué días y qué piensa de lo que está pasando. Hay muchas cosas, así fuimos haciendo el trabajo.

Pero aquí en la CND creemos que esas medidas a lo mejor ustedes sí lo van a tener que dar parecer también, pero algunas, ya no van a ser todas. Porque nosotros pensamos que ya hay muchos compañeros en la CND, pero muchos, que yo sé. Entonces sería cuestión de que ya deben juntarse esos muchos en grupos, o colectivos como ustedes le llaman, en la ciudad principalmente. Se juntan, pero para juntarse necesitan que alguien sea (en ese caso serían ahora los que asumieron el cargo, los directivos de la CND en este caso, pero no sé cómo va a quedar ahora que sepamos cómo está su estructura), pero lo que nosotros pensamos es de que se juntan y ya una vez que se juntan esos grupos, esos colectivos, tienen que elegir en cada grupo lo que serían delegados de la CND. Ya que ya hay muchos grupos, muchos delegados (o no sé cómo lo van a llamar pues, es lo que nosotros no sabemos aquí, pero por lo que yo veo es que le llaman delegados), entonces ese delegado y otros delegados tienen que formar un delegado regional, pero eso es en base al trabajo que van a ir realizando; ese trabajo lo amerita el caso por el trabajo, por el desarrollo que van dando los compañeros responsables o delegados de ese grupo colectivo, o de plano de esa comunidad o de ese barrio.

Así es como debidamente nosotros pensamos que se puede hacer un buen trabajo. Pensamos que así saben con cuántos compañeros verdaderamente cuenta la CND. Como ya tienen ahora, por decirte así, como ya tenemos la CND, estamos hasta la mera cúspide -¿como le llaman ustedes?-, la mera punta pues. Nosotros le decimos aquí la mera punta, ustedes le llaman la mera cúspide [...]. Ya estamos en la nacional, pero yo les quisiera preguntar a ustedes: bueno, dónde está el delegado de tal barrio, por decir, y cómo se llama ese delegado, y cómo se llama su región; y cuándo llegó a estatal, cómo llegó a ser estatal?; ¿es por el volumen?, o cómo le hicieron. ¿Alguien puede explicarme?, ¿pueden explicarme cómo llegaron a estatal? ¿No? De lo que nosotros sabemos, compañeros, es porque ustedes se juntaron antes del 12 de enero, es porque se salieron, es porque quisieron que nosotros no nos vamos a morir y salieron así, pero así, ni siquiera se organizaron, porque de por sí ustedes ya están prácticos, ya están entrenados en el movimiento y nosotros lo sabemos, pero, ¿cómo se eligieron? No hay, como que no hay quién esté viendo los asuntos así de los compañeros de ese colectivo, de ese grupo, de ese barrio, de esa región, de ese municipio, y cómo se formó el delegado estatal y qué hace.

Ahí es donde nosotros lo vemos con un poco de paciencia, aunque algunos van a decir «Pues es que vamos a regresar». No, es que podemos hacer lo mismo pero más fortalecido, y esos compañeros que son elegidos deben ser elegidos por ustedes y por los otros compañeros, por mayoría de votos, o sea democráticamente, para que ustedes, en el momento en que ese compañero no hace bien su trabajo, le digan «Compañero, tú estás fallando aquí, no estás cumpliendo». Pero mas enseguida decimos primero cómo vamos a empezar a hablar con este compañero cuando de plano está mal su trabajo. También tenemos la receta.

Entonces cuando ya ese trabajo político se crece, se desarrolla, se distribuye de acuerdo a las zonas geográficas -ustedes lo saben mejor que yo (unos a lo mejor tienen carrera de ingenieros o algunos de por sí son)- entonces así se distribuyen las regiones, dependiendo del terreno, o sea de la parte en que nos encontramos; es donde se forma una región y otra región. Entonces ya cuando hay varias regiones, pero así muchas, unas tres, cuatro, cinco, seis, hasta diez regiones, entonces sí ya se tiene que formar su delegado a ser regional (o no sé cómo le van a llamar ustedes, municipal, no sé, yo no sé hasta ahorita).

Pero nosotros les sugerimos eso: hay que empezar ahora sí de la base. La importancia del ser político es de que tengamos base de los compañeros, eso es principalmente. La base es fundamental y no nos pueden mover nadie. Ahora sí, ni el hambre, ni la desnudez, ni en la muerte, no nos pueden vencer, porque estamos bien fundados, estamos bien formados, desde el principio.

Ya con eso, se empieza a dar la división del trabajo de los compañeros. Entonces se dividen los trabajos, se empieza a coordinar los trabajos, se divide. Ya no todo lo tiene que hacer uno, porque hay otros compañeros que se están capacitando en ese terreno político. Y esos compañeros que se eligen libre y democráticamente son los que se encargan a proponer a las bases. Son los que proponen en una asamblea de compañeros de delegados de la CND, local o regional; en este caso hablando de la región se dirige a los locales y los locales se van a las bases de apoyo o en ese caso a los miembros de la CND. Pero sí se tiene que ir, tiene que salir de allá para que se regrese. No tiene que decidir, no tiene que hacer la base, o sea los compañeros miembros de esta CND, no debería de hacer lo que aquí yo diga como presidente, sino lo que ustedes dicen yo tengo que acatarme por la mayoría de votos de ustedes.

A lo mejor le estamos dando un sentido contrario, compañeros, pero a veces no tienen que entenderlo, como que estamos ofreciendo un programa así pues, una política moderna pues. Es que no se le entiende, y por eso cuando nos vienen a preguntar algo a nosotros, no lo pueden entender porque nosotros trabajamos de otro modo. Y si nosotros hacemos así yo creo que Robledo Rincón se queda solo de por sí, porque las autoridades inmediatas son los delegados de la CND, en este caso serían los responsables locales, responsables regionales, responsables de toda una zona o de un municipio. Y ya el presidente, como que a última hora se va a quedar solito, porque esos solos se autogobiernan, se organizan y todo.

Entonces eso es lo que nosotros queremos dirigirles a ustedes. Esos compañeros son importantes en la medida de sus trabajos, porque ¿cuántos compañeros locales tienen ustedes, delegados de la CND?, ¿cuántos regionales tienen?, ¿cuántos municipales? Y cuando se formaron los municipales, ¿dónde se formó, qué día, qué hora?, y cuando formaron al estatal, ¿dónde?, ¿quién es? Que se presente con cuántos votos, si fue unánime o por mayoría de votos, cómo fue.

Ese procedimiento, compañeros de la CND, nosotros lo vemos como que así se necesita hacer.

Esos compañeros, que acabamos de hablar como una estructura de la Convención que nosotros les proponemos, son los encargados de vigilar el cumplimiento de los trabajos; los delegados locales son los que tienen que hablar con la base y esos tiene que decir con el delegado regional «Hemos hecho ya esto, o tomamos este acuerdo» Pero así, desde la base. Y lo otro es que debe informar los avances del trabajo, tiene que informar.

‑¿Qué informa usted aquí en Aguascalientes?

‑Pues no, ya se quebró el piso.

‑¡Ah!, bueno. Pues vamos a buscar una bolsa de cemento entre todos. ¿Cuánto le toca?

‑No, cinco centavos.

‑¡Orale!.

Desde ahí.

‑No, pues que las bancas se están pudriendo, hay que guardarlas antes que se pudran ahí, pues nadie lo guarda.

No. Debe de haber algo, se deben informar los trabajos.

La otra es: pongan fechas de reuniones nacionales o locales, tienen que tener fecha. Es importante las fechas para que no venga alguien y diga:

‑No, pues esta fecha.

‑No, pues no estamos de acuerdo, mejor la otra.

Tienen que fijarse ya. Ya debe estar entendida desde allá para la instancia correspondiente.

Esto es importante porque entre una región y otra región entonces hay un intercambio de experiencias. En este caso serían las experiencias del estado de Guerrero y las experiencias del estado de Michoacán y de otros estados. Entonces ya cuando nos juntamos, entonces llegan y decimos:

‑¿Cómo lo resolvimos?

‑Hicimos así.

Hay un intercambio de la experiencia de un asunto que hicimos o que estamos pensando.

Y hasta el último viene uno que a lo mejor sí, eso se ve así como que no es importante: es que en esa reunión debe de haber una sesión de crítica. Debe de verse una sesión de crítica y autocrítica al mismo tiempo. Si yo ya me dí cuenta que ya cometí un error, yo debo decir, antes que me critiquen, «Yo cometí este error». En vista de todos les digo «Yo cometí este error y les pido que me disculpen», y ahí se sigue: escuchamos «Otro día no lo hagas» ¿O no?  Pero a veces nos tienen que decir más fuerte. Pero eso es cuando nos damos cuenta y cuando de plano no, entonces digo «No, bueno, es que fulano, vi que esto le falló y pensamos que eso se debe de corregir».

Esto cuando nos reunimos. Eso es importante. No es para pelear ni es para dejar el trabajo que uno hace; si esto es nuestro deber hacerlo. Porque si a nosotros no nos dicen por dónde estamos fallando podemos irnos así, y como nadie nos dice pues no sabemos qué errores estamos cometiendo.

Entonces nosotros pensamos que la CND tiene todas las posibilidades. Sólo que ahora tiene que hacer ese trabajo, o a lo mejor tiene otra estructura que parezca mejor. Por la experiencia que nosotros tenemos en el caminar como EZLN, tenemos esa forma de organizar, esa forma de ir reclutando compañeros, y por eso ustedes ven que los compañeros están aquí. Ustedes ven que hay niños, hay compañeras, hay compañeros de bases de apoyo, ya tiene unos días que estamos aquí y ya tienen ellos.

Entonces, así como ustedes ven, son cuestiones importantes -así lo creemos nosotros- y cuando vienen y preguntan cómo está aquí al fondo, que nadie lo entiende, porque solamente los que lo hacen lo entienden. Y puede venir el mejor político que haya, pues, porque a nosotros nos pueden parar aquí entre los 500 diputados federales, entre los 60 del Congreso de la Unión. A nosotros nos pueden parar ahí y nosotros les decimos todas sus babosadas que hacen adentro.

Se los digo claro porque yo milité ‑yo no fui diputado, no fui senador, yo no soy nada, yo soy campesino‑ pero los fui a ver hasta donde estaban, personalmente, y los conozco bien. Conozco organizaciones, uniones, asociaciones, presidencia de la República, ni me digan de Los Pinos, ni de nada, porque lo conozco bien. Y nos enseñaron todas las pinches mañas que tiene el PRI, pero no las aprendimos, pero aquí somos expertos en eso y de esos tenemos cuidado; pero les decimos claro que nosotros sí nos conocemos todas las babosadas que hacen adentro, porque los fuimos a ver cómo están. Yo no [...] como ustedes y pusieron un letrero en Los Pinos, un día, y ahí estuvimos y vimos todo, los diputados ahí.

Entonces, compañeros de la CND, nosotros vemos esa posibilidad que ustedes tienen. Nosotros creemos que ustedes pueden hacer un trabajo bastante valioso, pero muy grande; que pueden aglomerar el número que ustedes no se imaginan. Ya lo tienen, sólo falta que ustedes empiecen por ahí, si es que así lo creen o si hay otra forma, pero les digo aquí, en concreto: no se vayan con el conformismo del volumen, sino la calidad que tienen aquí, como compañeros de la CND.

Muchas gracias.