Por mi voz habla la voz del Ejército Zapatista de Liberación Nacional.
Hermanos
y hermanas:
Yo voy a decir unas palabras para los pueblos indígenas
de este país mexicano.
Nosotros los zapatistas somos los que nos levantamos en armas
en el año de 1994 por una causa justa y digna que por
lo cual nos dimos cuenta que hace más de 500 años
hemos venido viviendo en la explotación y la miseria.
Nosotros los zapatistas le decimos claro que nuestra lucha
no es sólo para nosotros los indígenas. Es para
todos y todas las y los indígenas y los no indígenas.
Pero especialmente le digo nuestra palabra a los pueblos indios.
Les hacemos un llamado a todos para que se organicen de verdad.
Que no sea sólo de palabra o de un momento. Que verdaderamente
lo demuestren en los hechos.
Ya es el momento que todos nos organicemos y que formemos
nuestros municipios autónomos.
No hay que esperar hasta cuando el mal gobierno nos de permiso.
Debemos organizarnos como verdaderamente rebeldes y no esperar
a que alguien nos de permiso para ser autónomos, sino
con ley o sin ley. De manera que sí deben funcionar
nuestras autoridades en rebeldía y así poder
autogobernarnos.
Sólo así puede funcionar verdaderamente la democracia
al interior de un municipio. Pero también les decimos
que hay que saber resistir. No sólo de recibir migajas.
Sino que hay que resistir todas las burlas y las persecuciones
que pueda sobrevenir de parte del enemigo que enfrentamos
que son los malos gobiernos que por cientos de años
han venido manipulando en la forma de gobernar.
Hoy ya no nos importa. Ya somos una organización rebelde
y sabemos gobernarnos sin la necesidad de quien nos enseñe.
No esperemos un cambio a esta situación de parte de
los poderosos y sus partidos políticos.
Alertas con lo que viene por las grandes consecuencias a contra
de todo México. Como el Tratado de Libre Comercio en
su parte del campo que es sólo para beneficio de los
ricos. Nos quieren engañar que es para mejorarnos.
Esto son puras mentiras porque la verdad ellos quieren destruirnos
y exterminarnos.
Pero no lo lograrán. No lo permitiremos. Nos defenderemos
a toda costa para que así la tierra sea de quien la
trabaja. Y por lo tanto tenemos la razón.
Porque nosotros tenemos el derecho a vivir a nuestros hijos
y a los hijos de nuestros hijos. Porque para nosotros nuestras
tierras es nuestra madre. Porque nuestra madre no lo venderemos.
Mucho menos lo permitiremos que lo quite algún hijo
de puta. Primero muertos antes de permitirlo.
No caigamos en las trampas camufladas de la verdad y armadas
cuidadosamente para no poderlo detectar.
Pero esos tontos pobrecitos a nosotros los zapatistas no nos
podrán engañar. Mucho menos conquistarnos.
¡Viva
el Ejército Zapatista de Liberación Nacional!
¡Vivan los pueblos indios!
¡Vivan los campesinos!
Desde las montañas del sureste mexicano.
Comité Clandestino Revolucionario Indígena-Comandancia
General
del Ejército Zapatista de Liberación
Nacional.
México, 1 de enero del 2003.