Creación del Municipio zapatista San Pedro de Michoacán

Hermann Bellinghausen, Guadalupe Tepeyac, Chis. En lo que hasta ahora se conocía como Guadalupe Tepeyac, ayuntamiento de Las Margaritas, el EZLN anunció la creación de un municipio zapatista: San Pedro de Michoacán, Estado Rebelde de Chiapas, como se lee en la fachada del edificio que antes albergaba a periodistas y visitantes, a un costado del hospital y hoy pintado de negro y café y con una estrella roja en la fachada, que es la oficina de las nuevas autoridades municipales.

Durante una sobria ceremonia a la que asistieron las bases de apoyo y un pequeño batallón de milicianos e insurgentes del EZLN, el comandante Tacho anunció: "Voy a hacer entrega de las llaves de este local", luego de leer un mensaje del CCRI-CG, en el que declaró:

"El día de hoy, tomando en cuenta lo dicho en la Primera Declaración de la Selva Lacandona, que ordenaba a las tropas zapatistas proteger «en su avance liberador a la población civil y permitiendo a los pueblos liberados elegir, libre y democráticamente, a sus propias autoridades administrativas», y en cumplimiento a lo señalado en la Ley de Derechos y Obligaciones de los Pueblos en Lucha, del conjunto de leyes revolucionarias zapatistas de 1993, que en su artículo primero a la letra dice:

Los pueblos en lucha contra el gobierno opresor y los grandes explotadores nacionales y extranjeros, sin importar su filiación política, credo religioso, raza o color, tendrán derecho a elegir, libre y democráticamente, a sus autoridades de cualquier clase que consideren conveniente y a exigir que sean respetadas.

El Consejo, nombrado en asamblea, está formado por ocho hombres de distintas comunidades adyacentes. Sus miembros rodeaban al mayor Moisés y al comandante Tacho en el transcurso del acto. El comandante Tacho agregó:

"A nombre del CCRICG del EZLN hago entrega formal del poder civil de este territorio a las autoridades municipales libre y democráticamente elegidas para presidir el ayuntamiento del nuevo municipio zapatista de San Pedro de Michoacán".

Después recordó que, de acuerdo con el CCRI, las leyes que "deben cumplir y hacer cumplir en su mandar obedeciendo" son la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos "de 1917", las "leyes revolucionarias zapatistas" y "las leyes locales del comité municipal que la voluntad popular de la población civil determine".

A diferencia de otros actos, el ambiente era frío, sobrio, tenso. A cierta distancia de ahí, más allá del batallón zapatista que acompañó la ceremonia, el subcomandante Marcos presenció el acto, también en silencio.

Para terminar, el comandante Tacho señaló: "Les recuerdo que las autoridades del pueblo siempre deben mandar obedeciendo lo que el pueblo diga. Si ustedes se apartan del camino que marca la voluntad del pueblo, serán desconocidos por el mismo pueblo".

En términos muy similares, el mayor Moisés hizo entrega del territorio, en nombre del EZLN, al nuevo consejo municipal:

"Cumplimos como fuerza armada", dijo, y agregó: "A partir de hoy, ustedes como autoridades del gobierno rebelde, deben cumplir y hacer cumplir las leyes revolucionarias zapatistas de 1993", las cuales enumeró.

Su mensaje, casi tan breve como el anterior, terminó así:

"Nosotros, como ejército del pueblo que somos, nos alzamos en armas contra el mal gobierno. Si ustedes son buen gobierno, nosotros pondremos nuestras armas a su servicio. Si ustedes son mal gobierno, nosotros pondremos nuestras armas en contra de ustedes".

El comandante Tacho dio entonces paso a las nuevas autoridades, aplaudidas por los hombres y mujeres del pueblo que presenciaron el acto. Los miembros del nuevo consejo dirigieron, uno por uno, palabras de compromiso. El primero en hablar hizo mención a "las obligaciones que tenemos que echar a andar entre todos".

"Son muy difíciles los momentos que estamos viviendo -agregó-. Somos sociedad civil, población civil. Y es como un niño que no sabe cómo empezar a gatear".

Estas modestas palabras hacen pensar en el "punto cero" que mencionó Amado Avendaño el día 8 durante su toma de posesión. Este nuevo municipio parte casi de la nada, y, como dicen los miembros del nuevo consejo, enfrenta "la preocupación por comercializar los productos, avanzar en salud, en la educación; nuestros niños no tienen escuela, pues ya no vienen los maestros" y aclara que funcionarán con un nuevo sistema, y no "como hemos venido trabajando con los de allá afuera".

"Estamos dispuestos a cumplir según lo que el pueblo diga, y aquí termino porque no tengo tantas palabras".

Otro orador, miembro del consejo, mencionó las cinco horas que hay que caminar para llegar a su comunidad y se comprometió: "Lo posible que podamos hacer lo vamos a hacer donde podamos".

Concluido el acto, el nuevo consejo municipal anunció:

"Vamos a hacer un momento de baile, porque en los momentos difíciles también tenemos que estar alegres".

El hombre que encabezará el consejo, un campesino de la región, señaló hacia el patio de la escuela, donde esperaban dos marimbas y una hilera de bancas alrededor de la cancha de básquetbol.

No se sentía, como en otras ocasiones, un ambiente tan festivo, pero sí las ganas de no azotarse. Dijo el orador: "No nos sentimos desesperados ni nos admira nada de lo que pueda pasar".

La gente se dispone al festejo mientras el contingente de milicianos e insurgentes se retira y el mayor Moisés, con la bandera rojinegra, el comandante Tacho y el subcomandante Marcos se alejan a caballo; el consejo municipal realiza su primera reunión de trabajo en el interior del "ayuntamiento", apenas equipado con unas cuantas sillas.

Al abandonar Guadalupe Tepeyac, o al ingresar, puede leerse una manta blanca que anuncia: "Bienvenidos al Municipio Zapatista San Pedro de Michoacán, estado rebelde de Chiapas, Cabecera Municipal: Guadalupe Tepeyac".

Con este inesperado acontecimiento, el EZLN da un giro a los cambios municipales y regionales que, en distintas regiones del estado, y ahora bajo el manto del gobierno avendañista, se han estado efectuando, como es el caso de la "región autónoma" del norte de Chiapas y la franja fronteriza, también "autónoma", que se ha conformado en meses recientes, en la que ya era una fuerte movilización municipal que hasta ahora, y pese a las tensiones, se ha mantenido dentro de cauces pacíficos.

Los oradores insistieron, con modestia, en la condición "infantil" del proceso. "Estamos aprendiendo como un niño", había dicho otro miembro del consejo.