Discurso del Subcomandante Marcos durante la visita de Cuauhtémoc Cárdenas, 17 de mayo de 1994.

 

Queremos agradecer a todos los hombres y mujeres, niños y ancianos, que se organizaron para recibir y alimentar al señor Cárdenas Solórzano y personas que lo acompañan. Estos niños, ancianos, mujeres y hombres son el verdadero sustento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional, su fuerza y su base de apoyo. Si en ellos se sustentara cualquier gobierno, sería un buen gobierno.

Desde varias y diferentes poblaciones caminaron días y noches no sólo para recibir al señor Cárdenas y personas que lo acompañan, sino para hacerle ver una pequeña parte del motivo del fuego de nuestros fusiles.

Cercados por el enemigo, amenazados con hambre y sin medicinas, nuestros pueblos zapatistas no se rinden, no se venden y no olvidan.

En el nombre del Comité Clandestino Revolucionario Indígena-Comandancia General, queríamos agradecer a los hombres y mujeres sin rostro, a los que son montaña, a los sin nombre, a los sin más voz que el fuego, a las tropas zapatistas todas y, especialmente, a las heroicas tropas del primer regimiento de nuestro ejército. En la verdad de sus corazones, en la alerta de su pensamiento, y en el poder de sus fusiles que sostuvo el dispositivo de seguridad para recibir al señor Cárdenas Solórzano y personas que lo acompañan.

Queremos, por último, saludar la memoria de nuestros muertos, de nuestros muertos que bajo estas mismas tierras nos cuidan y nos guían. De su sangre que es el único alimento verdadero que nos sostiene. Para nuestros muertos, larga vida en la muerte nuestra.

Ejército Zapatista de Liberación Nacional.

Mensaje a Cuauhtémoc Cárdenas, candidato del Partido de la Revolución Democrática a la Presidencia de la República:

Al pueblo de México:

Hermanos:

El día de hoy, 15 de mayo de 1994, dentro del territorio controlado por las fuerzas insurgentes del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) hemos recibido la visita del señor Cuauhtémoc Cárdenas, candidato del Partido de la Revolución Democrática a la Presidencia de la República Mexicana.

El Comité Clandestino ya ha saludado, esta mañana, la presencia del señor Cárdenas y personas que lo acompañan. Quisiéramos hacer notar nuestro reconocimiento a su valentía para ingresar a nuestro territorio y a su honestidad por confiar su seguridad a los combatientes zapatistas que escribieron una página gloriosa en la historia militar revolucionaria, al tomar la cabecera municipal de Las Margaritas en la madrugada del día primero de enero de este año.

El señor Cárdenas ha venido a escucharnos y lo ha hecho con atención y respeto. Esperamos que la palabra verdadera de los hombres y mujeres sin rostro sea escuchada y tenga un lugar en su corazón.

Nosotros, hombres y mujeres con el rostro amordazado, no hemos pedido un lugar especial en la historia, no estamos luchando por dinero, por un cargo político o por unas líneas en los libros de historia política. No hemos reclamado en vez alguna la paternidad del parto del mañana mexicano, que será democrático o no será. No hemos ni habremos de escatimar sangre y muerte para ese mañana, aun cuando los que gobiernen ese mañana nos arrojen al rincón de donde salimos con nuestro grito de guerra.

Los que para hacernos escuchar tenemos que morir, los siempre olvidados de las ideas revolucionarias y de los partidos políticos, los ausentes de la historia, los presentes siempre en la miseria, los pequeños, los mudos, los eternos infantes, los sin voz y sin rostro, los abandonados, los receptores del desprecio, los incapacitados, los abandonados, los muertos sin cifras, los instigadores de la ternura, los profesionales de la esperanza, los del digno rostro negado, los pura rabia, los puro fuego, los del ya basta, los de la madrugada, los del para todos todo, para nosotros nada.

Los de la palabra que camina, nosotros, queremos no el deber, no la gloria, no la fama. Nosotros queremos ser simplemente la antesala del mundo nuevo. Un mundo nuevo con una nueva forma de hacer política, un nuevo tipo de política de gente del gobierno, de hombres y mujeres que mandan obedeciendo.

Nuestros muertos nos han hablado y hemos escuchado en la palabra democracia la base de ese mundo nuevo.

El candidato que hoy recibimos es apoyado por un partido político que lleva por apellido la palabra democracia. Por eso queremos decir unas palabras sobre el PRD.

Hemos visto con preocupación que el PRD tiende a repetir en su seno aquellos vicios que envenenaron desde su nacimiento al partido en el poder. Aquellos que luchan por la democracia practican en su interior la intriga palaciega, el acuerdo de cúpula, el eterno traicionarse, la mentira, el peor ajuste de cuentas: la traición.

Y puede decirse que no conocemos bien al PRD y por eso hablamos estas palabras. Se puede decir que no es así, que las diferencias se resuelven apelando al sentimiento de las bases, que no hay zancadillas, arrebatos ni golpes bajos.

Se puede decir que el PRD es en sí mismo democrático, se puede engañarnos y engañarse, pero es seguro que el mañana democrático en México no nacerá de estos métodos políticos.

Hay gente dispuesta a dar la vida por un proyecto partidario, pero qué democracia, libertad y justicia nos ofrece el PRD. ¿La que practica en la selección interna de sus candidatos y lo lleva a descalificar por decreto a todas las fuerzas políticas que no sean el PRD, o que no acepten sujetarse a él, o que lo llevan a practicar el mimetismo político y en nada diferenciarse al proyecto del partido en el poder, lo que lo hace practicar malabarismo político y aparecer ayer en la izquierda, hoy en el centro y mañana en dónde?

Lo que lo lleva a congraciarse con los poderosos, llevando la bandera de un proyecto económico que tanto costara y costará al país. ¿Cuál es la diferencia entre el PRD, el PAN y el PRI? ¿No ofrecen el mismo proyecto económico? ¿No practican la misma democracia interna?

Éstas son las preguntas que deberán contestarse antes del 21 de agosto. No lo pedimos para nosotros. Es a nosotros a quienes nos han pedido hacer llegar, a través de nosotros, estos interrogantes al PRD.

Muchas fuerzas apoyan la candidatura del señor Cárdenas Solórzano para la presidencia de México, pero no serán éstas las definitivas para el tránsito a la democracia, tampoco lo seremos nosotros, los zapatistas, la fuerza en que se llegue al cambio democratizador.

La única fuerza capaz de llevar a cabo el tríptico libertad, democracia y justicia, y de cambiar el mundo entero, es la fuerza del pueblo, la de los sin partido ni organización, la de los sin voz y sin rostro. Quien gane con verdad esta fuerza, será invencible.

Esta fuerza del pueblo no se obtiene con engaño ni imposiciones, no con mentiras, no con traiciones; esta fuerza se gana con ejemplo, verdad y honestidad.

Si un partido político puede reclamar para sí esta autoridad moral entonces puede estar seguro del triunfo, aun cuando un fraude le quite temporalmente la victoria.

El camino de hacer valer la libertad ya está marcado, lo señalaron' hombres y mujeres sin rostro. No tiene regreso y sus aspiraciones están' presentes: democracia, libertad y justicia.

El CCRI hace una diferenciación entre Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano y el PRD. Queremos que se entienda bien este mensaje del EZLN.

No suplicamos, no rogamos, no mendigamos democracia; aconsejamos, advertimos, exigimos democracia.

Si se repite el panorama político de 1988, si no hay vía pacífica en el tránsito a la democracia, hay ya de nuestra parte, de hombres y mujeres sin rostro, otra vía, la guerra.

Un gobierno de transición democrática y un nuevo Constituyente que aseguren en la ley y en los hechos el complemento de las demandas fundamentales del pueblo mexicano, las demandas de democracia; libertad y justicia, demandas de dar voz a los sin voz, rostro a los sita rostro, mañana a los sin mañana y vida a nuestra muerte.

Éste es el camino que seguirá nuestro pueblo en cualquiera de las dos puertas que están abiertas. Éste es el camino que habremos de andar aun a costa de la vida de todos los zapatistas. Éste es el camino: democracia, libertad, justicia.

Desde las montañas del Sureste mexicano

Subcomandante Marcos

CCRI-CG del EZLN