ENTREVISTA A MARCOS

por 20 periodistas al regresar de San Cristóbal

David Aponte y Matilde Pérez U., Selva Lacandona, Chis. [LJ, 15/iii]. El EZLN no emprenderá iniciativa de fuego alguna y frenará cualquier tipo de acción "bélica aventurera", independientemente del resultado de las consultas sobre los compromisos para una paz digna, manifestó el subcomandante Marcos.

Categórico, afirmó que el EZLN no romperá el cese unilateral del fuego pese a las provocaciones y acciones en contra del proceso de pacificación de parte de los finqueros y ganaderos de Chiapas. "Si los finqueros no toman la iniciativa militar en nuestra contra, nosotros tampoco lo haremos porque ya existe el compromiso del CCRI de respetar el proceso electoral de agosto, por iniciativa propia", agregó.

En este momento, el trabajo político está por encima de las acciones militares, y el llamado a las comunidades de la región y todo el país es: "¡Aquí estamos! Ése es el grito que lanzamos ahora", explicó.

Entrevistado en uno de los centros de operación militar de los insurgentes, el subcomandante habló de sus estrategias y tácticas militares, de la base social del movimiento en las comunidades y del gobierno que ejercen desde hace dos años en las zonas controladas.

Sentado en una banca de madera, un tanto alejado de su guardia personal, con una cachucha color crema en la que figuran tres estrellas rojas, Marcos comentó que el EZLN se encuentra ahora en una etapa de sobrevivencia y de conservación de los logros de la primera campaña: el interés de la opinión pública nacional e internacional en el movimiento armado de los indígenas chiapanecos y el freno de acciones bélicas aventureras.

-¿Cuál ha sido la estrategia militar del EZLN?

-Hace 10 años iniciamos el entrenamiento militar y superamos la etapa de la supervivencia física. Entonces, aprendimos sobre las armas, a caminar, a correr y a recibir lo que nos da la montaña. No había trabajo político entre las poblaciones. Cuando logramos resolver eso, empezamos a mandar compañeros a hacer trabajo político en los pueblos; en esta segunda etapa, el trabajo de preparación política pasa a un primer plano. Esas son las dos formas de lucha y dependiendo del periodo histórico o la coyuntura, se intercalan una y otra. Hoy lo político subordina al plano militar.

"Entonces, en nuestra estrategia de segundo nivel se plantea el tipo de guerra y si lo debe hacer un ejército regular, flexible, capaz de pasar de unidades guerrilleras a unidades regulares y viceversa. El EZLN tiene esas dos posibilidades, con la capacidad de seguir haciendo trabajo político de una forma u otra. Como ejército regular en un territorio controlado, como el de ahora, pero también como guerrilla perdiendo incluso el territorio controlado y desde la montaña estar lanzando acciones de propaganda armada para seguir haciendo un trabajo político. Es un caso tan sencillo como decir «aquí estamos, no nos han aniquilado».

"Debe tratar de incorporar la mayor cantidad posible de pueblo o de base social sobre demandas incluyentes, no excluyentes. Tienen que ser suficientemente amplias para que eso genere apoyo y simpatía y que expliquen las razones de la lucha armada, y la necesidad de abrir otras puertas porque las legales están muy cerradas y muy limitadas."

-¿En qué nivel están ahora?

-Estamos como ejército regular. Tenemos un territorio controlado con nuestras unidades distribuidas y ejercemos el gobierno en éste a través del CCRI. Es la dirección civil la que asume esta responsabilidad.

-¿Puede explicar cómo ejerce el gobierno y cuál es su legislación internas?

-Desde 1992 se votaron en todas las comunidades las llamadas leyes de la guerra. Entonces se discutió cómo resolver los problemas de la tierra y los impuestos de guerra. Ahí se acordó que los comités que sean gobierno en un territorio liberado tendrán que guiarse por esas normas, sin hacer a un lado las tradiciones y costumbres de las comunidades.

"Entonces, nosotros llegamos al primero de enero ya con esa pequeña constitución de las leyes de la guerra, por un lado, y del respeto o adecuación de los usos y costumbres de las comunidades. Lo estábamos ejerciendo desde 1992 de manera subterránea. Por eso hoy es fácil su aplicación, luego del repliegue de nuestras unidades militares. Cuando nos cercan, los comités tienen que asumir, naturalmente, el control del territorio que ya tenían de por sí."

-¿Cuáles serían las leyes que se aplican en este momento?

-Está la ley de mujeres -las mujeres y los hombres tienen que pedir permiso a la comandancia para casarse, bajo el entendido de que no pueden tener hijos. La ley de justicia, es decir, ahora los delitos no los puede resolver los gobiernos federal, estatal o municipal, se resuelven a nivel de ejidos o comunidades o ellos apelan a los comités para que se conformen en tribunal y sancionen y dicten el castigo dentro de nuestro territorio.

"Hay una ley para el caso de pugnas o roces entre ejidos por problemas de tierras o de ganado, que surgen naturalmente por el cobro del impuesto de guerra. Por ejemplo, lugares que sí pudieron cobrar el impuesto porque había quién lo pagara, pero en otras hay gente más empobrecida que no podía hacerlo. Esto generó roces, luchas y pugnas entre una región y otra.

"Está también el problema agrario, aunque ése no ha tronado todavía porque el Comité, después del cese del fuego y del diálogo, suspendió lo que serían las invasiones, las tomas de tierra y el reparto agrario.

"También está la ley de oficiales y elementos de tropa, la cual deriva en el consejo de guerra, que por cierto ya se aplicó a tres oficiales por cobrar impuesto directamente sin presencia de la autoridad civil."

-¿Cómo opera el impuesto?

-Para los sectores más empobrecidos es voluntario y el porcentaje varía de acuerdo con el tipo de propiedad y actividad. Por ejemplo, los propietarios de grandes extensiones de tierra tienen que pagar hasta 20 por ciento por la tierra y el ganado. Este es el más elevado. De ahí baja hasta ser voluntario. Sin embargo, la mayoría paga el impuesto de guerra y en algunos casos se consideraba como una colaboración para el mantenimiento del EZLN, viene siendo como lógico.

-¿El EZLN está acorralado en la selva por el ejército federal después del repliegue?

-Sí, en sentido militar nuestras fuerzas están accorraladas. No podemos hacer movimientos ofensivos o agrupar grandes o pequeñas unidades de tropa e intentar un avance como el primero de enero. Pero tenemos una posición defensiva y estamos en nuestro terreno, estamos entrenados para eso. Cuando nosotros nos replegamos, después de los ataques de las cabeceras municipales, a eso venimos.

-¿Este periodo del cese del fuego ha significado una ventaja militar para el ejército federal? ¿Ya los tienen ubicados o cercados? ¿Estaban preparados para esta etapa?

-Nosotros sí. Cuando viene el cese del fuego, el 12 de enero el ejército federal dice «los tengo localizados, tengo sus cuarteles, sus centros de comunicaciones, estoy listo para bombardearlos», de hecho así lo hace, incluso después de la orden del cese del fuego nos bombardearon varios puntos con el argumento de que la tropa no sabía del cese del fuego. Lo que ocurre es que entonces ya más o menos tiene la información militar de inteligencia completa y hace su plan para sacarnos de los poblados y aventarnos definitivamente a la montaña, y pasar a la etapa de contrainsurgencia, pero ya sin los medios de comunicación encima.

"Entonces, el ejército federal se percata de que las posiciones zapatistas coinciden geográficamente con los núcleos de población rural. Aún así pensó que sería fácil un aniquilamiento quirúrgico, dentro de esa mamada que salió del golfo Pérsico de que es posible hacer una guerra contra un pueblo sólo matando a los militares, sin afectar a la población civil. Me imagino que ahí es el cálculo del costo político.

"El gobierno y el ejército están desconcertados. Se preguntan quiénes son los que realmente encabezan este movimiento; se miran de reojo entre ellos para ver si no es el de a lado el que lo está apadrinando. Entonces, le entran al cese del fuego y al diálogo para ver quiénes están detrás de todo esto."

-¿Qué diferencias hay con otros movimientos guerrilleros, por ejemplo los centroamericanos? El EZLN tomó las cabeceras municipales y después las dejó.

-Sí, porque nuestra fuerza es campesina. No tenemos fuerza en las ciudades. Naturalmente toda la población campesina controla militarmente las ciudades y carreteras, no necesita atacarlas para controlarlas. Las ataca con un objetivo como el de recuperar armas, parque o hacer labores de propaganda.

"Nosotros iniciamos con labores políticas y con la formación de milicias en las poblaciones para la autodefensa de un territorio. En cambio, no tenemos capacidad de hacer acciones militares urbanas. En realidad las que ocurrieron durante el periodo del conflicto armado fueron obra de otras organizaciones, nada nuestro.

"La actual etapa del EZLN es sobrevivir y tienes que hacer que el costo en vidas sea nulo en el mejor de los casos y que te permita conservar el territorio para sobrevivir como fuerza combatiente.

"Otro de los objetivos es recibir las simpatías de la población que dice «No vayan a entregar las armas». Primero era «Dialoguen, hagan la paz»; luego «Sí, dialoga, pero no le creas al gobierno, no vayas a entregar las armas, porque si te van a dar algo es por estar armado. Si te desarmas ya no te van a dar nada». Consejos de este tipo de mucha gente", agregó.

Al llevar un mensaje, una de las combatientes interrumpió la conversación. Marcos se despidió con una anécdota del general Francisco Villa: "Su gente le preguntaba dónde iba a dormir. El hombre respondía en tal lugar y al día siguiente se aparecía por otro. Tenía miedo a que lo traicionaran".